Domingo
nueve de mayo
El
cielo amaneció nublado
Pero
con un pequeño rayo
El
sol solo quiso despejarlo.
Otra
vez me decidí por la tarde
A
dar un mágico y bello paseo
Porque
mis pasos quisieron llevarme
A un
barrio muy emblemático y bello.
Después
de un largo tiempo
Hoy,
de nuevo he vuelto a pisar
Esas
calles que derraman incienso
Y
azahar al llegar esa larga madrugá.
Después
de un largo tiempo
Mis
pasos quisieron perderse
Del
corazón brotó un lamento
Únicamente,
porque no pude verte.
Me
quedé sin verte otra vez
Habrá
que guardar el deseo
Para
el día en que pueda ser
Y
volver a entrar en tu templo.
Quise
continuar mi paseo
Esta
vez a la vera del río
Desde
allí, la Giralda contemplé
Escapándose
un profundo suspiro.
Esta
vez a la vera del río
Subiendo
por “la Inquisición”
Llegando
a Castilla, el motivo
Fue
sentir una gran emoción.
Por
ver tan solo de cerca
Esas
bellas y sentidas soleares
Sin
poder pararme esta vez a leerlas
Pasando
de largo por esa calle.
Puse
rumbo de regreso
Otra
vez, por el mismo camino
Sentándome
junto a ese espejo
Pensando
que siempre tendré un motivo.
Siempre
habrá un bello motivo
Que
me haga regresar a Triana
Aunque
sé que ahora no es lo mismo
Y
quizás el corazón, sufra esa tardanza.