Madrid le vio nacer
Pero tiene andaluza
el alma
Por suerte Sevilla le
vio crecer
Entre dos dulces
miradas.
Entre dos dulces
miradas
Que igual nombre llevan
Son dos bellas Esperanzas
Que le dieron el don
de ser poeta.
“Risas y
suspiros”, nombra
a Triana
“Quiero
ser la primavera”,
dedicó a Sevilla
Recuerdo oír sus
letras siendo una chiquilla
Cuando entonces, no
entendía nada.
Cuando entonces, no
entendía nada
Y empezaba a escuchar
el género
“El vaso
de cristal”, me
encantaba
“Cosa
Pura”, dedicó
a la paloma del cielo.
“El amor
que la espera”, dedica
a Sevilla
Por ser su hogar y mágica
inspiración
“Te fuiste con la Aurora”, con “la
Mirilla”
Por aquel
tiempo mucho sonó.
“Gitana”, sonaba
en una voz flamenca
Junto
a ella, “Mujer de Tinta y Papel”
“Gracias Rocío”, es
una oración sincera
Porque
su corazón es rociero también.
Tras
20 años de ausencia
“Con vengo de la vida”, regresó
Derrochando
de nuevo su alegría
Tras
una breve y bonita petición.
Queriendo
escribir algo
Mucho
tiempo llevo
Por tantos
buenos ratos
Que aun
sigo teniendo.
Le conocí
en mi Huelva
Un encuentro
que no olvidaré
De ahí,
nació una amistad verdadera
Que hoy
quisiera agradecer.
Porque
desde aquella vez primera
Hoy Sevilla
nos ha vuelto a ofrecer
Un breve
encuentro sin darnos cuenta
Y un
rato de conversación a la vez.
Y un
rato de conversación a la vez
Recibiendo
consejos y ánimos
Que se
valoran enormemente
Porque
son recíprocos también.
Es maravilloso
tener
Amigos
así porque pocos quedan
Como
mi admirado Poeta José
Sin que
los demás molestarse puedan.